Cuando tomamos consciencia de que nuestro cuerpo es nuestro aliado es que la alimentación a base de alimentos reales: de la tierra, libres de envoltorios, sin aditivos químicos, se vuelve plancentera y cocinar se vuelve una meditación en movimiento súper divertida.

Cuando soy consciente de que para vivir necesito darle a mi cuerpo la mejor calidad de alimento y de nutrición es que puedo cambiar mis decisiones alimentarias y nutricionales sin sentir peso, restricción, sino, todo lo contrario: se abre un mundo de infinito de posibilidades. 

Te invito a pensar tu nutrición contemplando: los alimentos, la respiración, tu conexión con el aire libre, el sol y la naturaleza. Tu manejo del estrés y las emociones, el ejercicio físico, los vínculos que sostenes, el trabajo, tu tiempo libre, sexualidadur